Cinco secretos para una vida más grata

by | Abr 19, 2024 | Meditación

Secreto #1
Enfócate en lo esencial: fe, familia, amistad y trabajo altruista.

Al cumplir los 65 años, la mitad de las personas experimentan mayor felicidad y disfrute de la vida, mientras que la otra mitad cae en un estado de melancolía.

¿Cuál es la clave que diferencia a ambos grupos?
Todos buscamos el éxito, definido de manera personal por cada uno. Sin embargo, paradójicamente, a medida que avanzamos hacia él, surge frecuentemente la tristeza. ¿Por qué? Con cada logro, el sentido de identidad y propósito puede desvanecerse, haciéndonos sentir menos valiosos.

Nadie alcanza la suficiente riqueza, fama o poder.
—Arthur Schopenhauer

El escritor Arthur Brooks lo denomina “la maldición del esforzado”: cuanto más nos aferramos al éxito, más doloroso es su eventual declive. A la luz de miles de estudios sobre la felicidad, Brooks subraya que el éxito no es un factor en la ecuación. Los más felices se dedican a la fe, la familia, la amistad y a un trabajo que aporte valor a la sociedad, en contraposición a un beneficio insaciable para los accionistas.

Secreto #2:
No pospongas vivir.

Estaremos de acuerdo en que uno de los grandes logros que perseguimos en la vida es acumular recuerdos y experiencias que nos satisfagan al final de nuestros días. Bill Perkins, en su libro “Morir con Cero”, nos insta a aprovechar al máximo nuestra vida antes de que se acabe el tiempo, acumulando experiencias y recuerdos. La elección es simple: ocuparnos de vivir o dejarnos morir.

A menudo pensamos que la vida es estática, que hay tiempo de sobra y que amigos y familiares siempre estarán ahí. Pero la realidad es otra: los amigos se van, los hijos crecen y los seres queridos desaparecen. La vida es un cambio constante. Crear esos “dividendos de memoria” temprano nos brinda un tesoro de experiencias al envejecer. Si tienes 50 años hoy, solo tienes un 50% de probabilidades de llegar a los 80. Y aunque alcances esa edad, no hay garantía de poder viajar y hacer lo que soñaste mientras estabas en la oficina. ¡Así que comienza a crear esos recuerdos mientras aún puedas!

Secreto #3:
El pico de la felicidad se sitúa entre los 18 y los 20 años.

Una encuesta reciente sugiere que la felicidad de los jóvenes ha disminuido en los últimos años. ¿Qué les preocupa?

La realidad es que nuestra felicidad alcanza su pico entre los 18 y los 20 años. Después, la curva desciende hasta mediados de los 50 años, ofreciendo un panorama desalentador. A mediados de los 20, los jóvenes descubren las verdades del mundo y sus limitaciones. Este desencanto inicia una tendencia sociológica: la adultez se pospone. Pero irónicamente, la felicidad no regresa hasta los 60. Retrasar la adultez solo posterga la dicha. En los 40, muchos descubren que la vida no es tan mala, incluso sin ser estrellas del pop o deportistas famosos. Aquellos con una base espiritual alcanzan este nirvana antes. Comenzamos a reconocer nuestra irracionalidad, nuestra mortalidad. La caída de la felicidad se estabiliza y empezamos a ascender, reconociendo que la vida está bien.

Secreto #4:
Retrasa la gratificación.

Aquellos que moderan la búsqueda de gratificación inmediata triunfan en sus carreras, relaciones, salud y bienestar. Pero no es fácil. No estamos diseñados para esperar, y estamos rodeados de tentaciones. ¿Cuántas veces te has perdido en internet hasta que se te cerraron los ojos? ¿Cuántos maratones de series has visto? Mejor no hablar de las veces que te has permitido ese helado lleno de azúcar sabiendo que no debías. Y luego te arrepientes. Si es difícil para los adultos, imagina para los jóvenes.

La mayoría de los problemas provienen de la gratificación inmediata. ¿Alguna vez te has preguntado por qué la mayoría de los ganadores de lotería terminan arruinados?

Según el psicólogo Daniel Kahneman, “los humanos constantemente sobreestiman el valor o el placer de lo que no tienen y subestiman el dolor o la pérdida de lo que sí tienen”. Este pensamiento nos lleva a cometer errores.

Secreto #5:
Abraza la soledad.

Nuestras vidas son lo opuesto al minimalismo. Estamos rodeados de voces parlanchinas: la televisión, los podcasts, las redes sociales, Netflix y el constante tintineo de los teléfonos inteligentes. La vida es caótica y nunca calla. Es casi imposible escucharse a uno mismo o pensar sin que algo interrumpa. Después de todo, esas voces incesantes son solo el eco de los pensamientos de otros, no los tuyos.

Con tanto ruido, no sorprende que la gente esté agotada y espere más de la vida. No hay espacio para el silencio, para la reflexión, para contemplar, para observar nuestros propios pensamientos ni para meditar.

La iluminación, la paz, la alegría, la plenitud, no vienen de pasar más tiempo en un mundo virtual o trabajar sin descanso. Vienen de adentro. Se logran estando en el presente, expandiendo la comprensión de la vida y del mundo, y aumentando tu conciencia. Por eso figuras como Jesucristo, Buda, Moisés o Mahoma emprendieron sus viajes espirituales en soledad.

Quizás lo que necesitamos ahora es eliminar el ruido y las distracciones, encontrar más aislamiento, más simplicidad, más claridad. Sentarnos a meditar, solos, tal vez en la naturaleza, y disfrutar de un poco de soledad.


Post inspirado en el artículo de Tom Green titulado Four Secrets to a Livetime of Happyness publicado en agosto de 2023 en www.tomgreene.com.

Foto de Amanda Kirsh de Burst